La optimización es una constante búsqueda del humano actual, por eso, se han creado herramientas como Trello, Monday, Notion, Forest y Microsoft Flow
Las herramientas tecnológicas para ahorrar tiempo van desde la automatización de procesos, pasando por calendarios de organización, hasta bloc de notas. Y es que ahorrar tiempo es un negocio, porque en un mundo hiperconectado, la optimización resulta clave.
Una de las plataformas más conocidas de ahorro de tiempo es Trello, una herramienta que permite supervisar y ordenar tareas para trabajar en equipo.
Monday, por su parte, es una herramienta de gestión de equipos. Esta plataforma permite visualizar las tareas y crear flujos de trabajo personalizables.
Notion es otra aplicación para organizar tareas multiplataforma. La clave de esta aplicación es que permite llevar planificación personal y laboral.
En el campo de la productividad a nivel personal para no perder tiempo, están las aplicaciones Forest y Microsoft Flow.
En el caso de Forest, el concepto de la herramienta se basa en plantar una semilla virtual que crece cuando la persona no hace uso del celular, pues el objetivo es no permitir entrar las distracciones, y cuando los usuarios acceden a la tentación de utilizar el teléfono móvil, la planta se marchita. Flow, por su parte, permite automatizar tareas repetitivas conectando todas las aplicaciones de Microsoft 365 y de terceros.
Sin embargo, de acuerdo con Mónica Ávila, coach de productividad y liderazgo personal, “el uso de una aplicación solamente ayuda cuando las personas tienen un proceso de organización y planificación de la energía, y de adjudicación de esta energía con base en las actividades que se van a desarrollar”.
Por lo tanto, el uso de herramientas tecnológicas puede ser clave siempre y cuando el manejo previo a nivel personal se maneje, “lo más importante es el proceso previo al uso de esas herramientas, porque la herramienta no ayuda a ahorrar tiempo”.
No obstante, en la opinión de la experta, no hay que “satanizar” la tecnología, pues nos permite ser más eficientes. “Utilizarla como herramienta de seguimiento control y mejora. Hay que tener claro este objetivo del uso de las plataformas tecnológicas”, concluyó.