La Superintendencia de Industria y Comercio anunció una sanción de 560 millones de pesos a la empresa de telefonía móvil Comcel (ahora Claro) por haber facturado el servicio de roaming internacional sin autorización de los usuarios.
De acuerdo con el Superintendente, Pablo Felipe Robledo, la sanción está en primera instancia, debido a que la empresa le facturó el roaming a 12 usuarios que no habían solicitado dicho servicio.
Según el funcionario, se encontró que para poder activar el servicio se requiere de una solicitud expresa al usuario y no puede ser una cláusula más adherida al contrato en el momento en que se efectúa.
La entidad de control aclaró además que todas las empresas de telefonía móvil deben tener dicha solicitud por parte de los usuarios para activar el servicio de roaming internacional.
Además se ordenó la devolución del dinero pagado a los clientes de Claro a quienes les activaron el roaming sin autorización.
A juicio de la SIC, esta conducta es reprochable porque vulnera los derechos de los usuarios, quienes deben estar plenamente informados de las reglas que aplican para la activación y prestación del roaming internacional para que al viajar fuera del país, pueda hacer uso de dicho servicio con total conocimiento de las condiciones que le aplican.
Así mismo la SuperIndustria dijo que es el cliente que debe elegir el tiempo que quiere que dicho servicio se encuentre activado (bien sea a termino indefinido o por un periodo determinado); y, que el proveedor no puede imponer servicios que no hayan sido aceptados expresamente por el usuario que celebró el contrato.
Según el funcionario, se encontró que para poder activar el servicio se requiere de una solicitud expresa al usuario y no puede ser una cláusula más adherida al contrato en el momento en que se efectúa.
La entidad de control aclaró además que todas las empresas de telefonía móvil deben tener dicha solicitud por parte de los usuarios para activar el servicio de roaming internacional.
Además se ordenó la devolución del dinero pagado a los clientes de Claro a quienes les activaron el roaming sin autorización.
A juicio de la SIC, esta conducta es reprochable porque vulnera los derechos de los usuarios, quienes deben estar plenamente informados de las reglas que aplican para la activación y prestación del roaming internacional para que al viajar fuera del país, pueda hacer uso de dicho servicio con total conocimiento de las condiciones que le aplican.
Así mismo la SuperIndustria dijo que es el cliente que debe elegir el tiempo que quiere que dicho servicio se encuentre activado (bien sea a termino indefinido o por un periodo determinado); y, que el proveedor no puede imponer servicios que no hayan sido aceptados expresamente por el usuario que celebró el contrato.