Los reguladores antimonopolio de la Unión Europea (UE) multaron al gigante del software Microsoft con 561 millones de euros (US$731 millones) por romper su promesa de ofrecerle a los consumidores europeos una opción de navegador web.
La Comisión Europea dijo que se tomaba muy en serio ese tipo de compromisos.
"Los compromisos legalmente vinculantes a los que se llega a través de decisiones antimonopolio juegan un papel muy importante en nuestra política porque permiten soluciones rápidas a problemas de competencia", dijo el comisario de Competencia, Joaquín Almunia, en un comunicado.
"Por supuesto, tales decisiones han de cumplirse estrictamente. Un fallo en su cumplimiento es una infracción muy grave que debe ser sancionada consecuentemente", dijo.