Para AT&T, la clave es ser escéptico con los correos que se reciben, en especial los que revelan urgencia por descargar archivos o acceder a URLs.
Una de las formas de infecciones cibernéticas más comunes ha sido la Amenaza Persistente Avanzada (APT, por sus siglas en inglés), y una de las mejores defensas contra estos ataques es educar a los usuarios sobre ellas. Sin embargo, ahora los hackers esconden malware destructivo en correos electrónicos que parecen venir de personas conocidas y que contienen temas que desean compartir. Esta situación hace que sea más probable que los usuarios abran este tipo de mensajes.
Es por esto que Paula Waldron, lead marketing manager de AT&T, aconsejó ser escéptico acerca del correo que se recibe. Revisar el contenido de los correos y evaluarlo, para verificar que no haya ninguna anormalidad en los correos que suele recibir por sus contactos.
También aconsejo ser desconfiado con mensajes que pidan abrir un archivo adjunto o responder inmediatamente. Ante esta situación, es recomendable confirmar la urgencia de dicha respuesta por otro medio, como llamada telefónica. De igual forma, sirve situar el cursor sobre el enlace para ver el URL y verificar que sea legítimo.
En cuanto a los mensajes que piden revelar información personal o corporativa, es menester asegurarse que se está tratando con alguien autorizado de tener esa información antes de enviarla.