
Xavier: Robot en Singapur.
Ciudadanos denuncian que su derecho a la privacidad se está viendo afectado por la tecnologÃa.
Singapur puso a prueba unos robots de patrullaje que lanzan advertencias a personas envueltas en “comportamiento social no deseable”, aumentando el arsenal tecnológico de vigilancia en este paÃs.
Este método ha sido fuertemente criticado por reducir la libertad de la población.
Los más recientes aparatos de vigilancia son robots, de nombre Xavier, con ruedas y siete cámaras que emiten advertencias al público y detectan “comportamientos sociales no deseados”.
Esto incluye fumar en áreas prohibidas, estacionar mal las bicicletas o violar las reglas de acercamiento por el coronavirus.
Su aparición ha aumentado la preocupación en dicho paÃs debido a la presencia de tecnologÃa intrusiva.‘Robocop’ en la vida real

Durante un reciente patrullaje, uno de los robots ‘Xavier’ ingresó a una zona residencial y se detuvo frente a un grupo de ancianos que observaban un partido de ajedrez.
“Por favor mantengan un metro de distancia”, “por favor aténganse a cinco personas por grupo”, alertó una voz robótica mientras una cámara del aparato los enfocaba.
Durante una prueba de tres meses en septiembre, dos robots fueron enviados a patrullar esa zona residencial y un centro comercial.
Frannie Teo, asistente de investigación, dijo que mientras caminaba por el centro comercial se acordó de la pelÃcula futurista, realizada en 1987: “Me recuerda a ‘Robocop'’”.
Además, agregó: “un mundo distópico de robots (...) Estoy un poco indecisa sobre este tipo de concepto”.
Desde el amplio número de cámaras CCTV (Circuito Cerrado de Televisión) hasta los postes de iluminación equipados con tecnologÃa de reconocimiento facial en fase de prueba, Singapur ha visto como cada vez más se realizan herramientas para vigilar a sus habitantes.
Las autoridades han impulsado su visión de una “nación inteligente”, hipereficiente y tecnológica, pero activistas dicen que se sacrificó la privacidad, e incluso que las personas tienen poco control del manejo de sus datos.El gobierno defiende los robots

Patrullaje y vigilancia en una zona residencial
Lee Yi Ting, una activista de los derechos digitales, dijo que los aparatos son la forma más reciente de vigilar a los singapurenses.
“Todo contribuye con la sensación de que la gente debe cuidar lo que dice y hace en Singapur, más de lo que lo harÃan en otros paÃses”, declaró el activista.
Pero el gobierno defiende el uso de los robots al decir que durante la fase de prueba no podrán identificar o tomar acciones contra quienes cometan ofensas, y que son necesarios para atender la falta de trabajadores ante el envejecimiento poblacional.
Ong Ka Hing, de la agencia gubernamental que desarrolló los robots Xavier, dijo que “la fuerza laboral está decreciendo” y que, en un futuro, estos aparatos podrÃan ayudar a reducir el número de oficiales requeridos para patrullar las calles.
‘No hay leyes de privacidad’: Singapur, en vigilancia extrema
La isla de 5,5 millones de habitantes tiene 90.000 cámaras policiales y tiene previsto duplicar esa cifra para 2030.
Además, tiene planeado instalar en toda la ciudad la tecnologÃa de reconocimiento facial, la cual ayudará a las autoridades a distinguir rostros en la multitud.

La tecnologÃa intrusiva se vuelve preocupante en Singapur.
Este año se dieron muestras de rechazo público cuando las autoridades admitieron que la policÃa tuvo acceso a la información sobre casos de covid-19 recogida por un sistema oficial.
El gobierno posteriormente aprobó leyes para limitar su uso.
Pero los crÃticos dicen que las leyes de la ciudad-estado suelen limitar poco la vigilancia gubernamental, y los singapurenses tienen poco control sobre lo que ocurre con los datos recogidos.
“No hay leyes de privacidad que restrinjan lo que el gobierno pueda o no hacer”, comentó Indulekshmi Rajeswari, un abogado singapurense especialista en temas de privacidad radicado actualmente en Alemania.