Ana Giraldo es colombiana y vicepresidenta mundial de la compañía inglesa Thomas Murray, con 28 años de experiencia en análisis de riesgo y tecnología aplicada a mercado de capitales en Europa, Asia-Pacifico y Norte América.
¿Cuáles son los planes de la compañía?
Nos estamos expandiendo desde Colombia para todo el continente y queremos incursionar en otras industrias. Ahora bien, nuestra tecnología para medir el riesgo cibernético empresarial, que recibió un reconocimiento internacional, le generará valor a las empresas colombianas, pues están aumentando su presencia digital. Nuestra solución para monitorear el riesgo de terceras partes será una herramienta importante para empresas con perfil sofisticado.
¿Qué tipo de clientes tienen?
Banco custodios como HSBC, BNP Paribas, Societe Generale, los cuales usan nuestros productos de inteligencia de riesgo y tienen nuestra tecnología detrás de sus firewalls. Inversionistas institucionales como fondos de pensiones (norteamericanos, australianos, neozelandeses y europeos) y fondos soberanos (de Europa y medio oriente). El tamaño promedio de nuestros clientes es de US$80.000 a US$100.000 millones. Los asistimos en la selección de sus bancos custodios. Hemos ayudado a transferir de un banco a otro US$1,9 trillones (millones de millones). Tenemos oficinas en Londres, Estambul, Moscú, Ginebra, Sídney, Hong Kong y Bogotá.
¿Cómo escogieron al país?
Creemos en el capital humano de Colombia. El número de colombianos en la empresa se duplicó este año, y consideramos contratar más jóvenes.
¿Que más hacen?
Nacimos como firma de análisis de riesgo y consultoría en liquidación y compensación de operaciones. Para ofrecer nuestro servicios tenemos tecnología, pero también la vendemos a empresas, inicialmente para bancos y fondos, pero hace poco desarrollamos herramientas de ciberseguridad en administración de riesgos a terceros que se pueden aplicar en cualquier industria.
¿Cómo está la ciberseguridad?
Muchas empresas tienen vergüenza decir que perdieron por ciberataques que les hicieron. Pero no solo es robar dinero sino datos, clientes, reputación. La información es clave y los hackers van por información y datos. En el congreso de la Andi vimos que el 50% de las empresas han tenido un ciberataque y lo ven importante, pero les hace falta conciencia e inversión y ver que hay que destinar recursos.
Eso no es un gasto sino una inversión. La inversión anual debería ser de al menos el 2% del presupuesto, pero en el caso de los bancos estos deberían destinar incluso hasta el 5% de su presupuesto anual.