El celular puede pagar todo
La banca móvil permite a los
bancos generar eficiencias operativas y fuentes de ingreso nuevas.
La banca móvil está en la cúspide
de la transformación: de un servicio de nicho para la élite tecnológica pasa a
una serie de servicios de mercado masivo exigido por todos los segmentos de
clientes.
De la casa se podrá salir sin
billetera, pero nunca si celular. Esa parece ser la tendencia gracias a la
banca móvil. Cada vez más personas utilizan el celular para realizar transacciones
bancarias, que ya se extienden a la posibilidad de usar este dispositivo móvil
como si fuera una tarjeta de crédito o débito.
Con una sola llamada, marcar
algún número o acercar el teléfono se puede hacer el pago de todo tipo de
compras o consumos, incluidos los servicios públicos y hasta una carrera de
taxi.
Según la empresa consultora
Deloitte, los banqueros han estado hablando sobre el uso de teléfonos celulares
como un canal para la banca de consumo, casi hace tanto tiempo como las
empresas energéticas han estado tratando de hacer la energía solar asequible,
pero se han formado una confluencia de factores que hacen de los móviles en la
banca una realidad.
1. La rápida adopción de
teléfonos inteligentes. En los últimos años, los consumidores ha dado de los
teléfonos inteligentes sus dispositivos móviles preferidos.
Los smartphones
permiten a los usuarios hacer llamadas, enviar y recibir correo electrónico y
mensajes de texto, navegar por la Web y realizar muchas otras tareas, como la
descarga de aplicaciones de software libre o de bajo costo. Según
informes de prensa, el número de teléfonos inteligentes vendidos en Estados
Unidos aumentaron más de 60 por ciento, de 26 millones en el 2008 a 42 millones
en el 2010.
2. Una capacidad importante
acumulada. La mayoría de los grandes bancos han hecho importantes inversiones
en capacidades de banca móvil y las instituciones financieras más pequeñas no
se quedan atrás.
Además, las compañías de redes
móviles, los proveedores de tarjetas de crédito y servicios en línea sobre
finanzas personales que permiten a los consumidores agregar sus cuentas en un
solo sitio web o aplicación, se encuentran entre los jinetes de las entidades
no bancarias para la posición de muchos en este espacio de rápido crecimiento.
3. Cambios en las preferencias de
los consumidores. Al igual que los cajeros automáticos y servicios de banca en
línea, los teléfonos inteligentes están dando a los consumidores más opciones.
Al ser capaces de acceder a la
información de sus cuentas y realizar transacciones sin necesidad de acceso a
sucursales bancarias, cajeros automáticos, o las computadoras, los consumidores
son capaces de tener acceso a su banco donde y cuando quieran.
4. La innovación de productos y
servicios. El canal móvil permite a los bancos ofrecer a sus clientes las
características que no se pueden encontrar en línea, tales como depósitos de
cheques a distancia, pagos de persona a persona, y la notificación en tiempo
real contra el fraude.
Tales características hacen de la
banca móvil una experiencia más rica que impulsará su adopción. Las
posibilidades son muchas porque la tecnología está.
Oportunidades para la
eficiencia operativa
Entre más operaciones se hagan
vía celular, más ahorros se pueden realizar.
Los bancos pueden darse cuenta de
la eficiencia operativa mediante la adopción de una estrategia de canal
integrado que incluya la banca móvil. Según el estudio de Deloitte,
basado en la banca estadounidense, el costo de procesar una transacción a
través del teléfono móvil puede ser hasta 10 veces menor que por medio de un
ATM y tanto como 50 veces menor que a través de una sucursal.
Dice el informe que un banco con
una media de 100 sucursales y 250 cajeros automáticos, y un depósito medio
diario/volumen de retirada de 165 operaciones de sucursales y 65 transacciones
en cajeros, podría llegar a ahorrar cerca de 5 millones de dólares al año si
fuera capaz de convertir 20 por ciento de esas operaciones a su canal
móvil.
Características tales como
depósito de cheques a distancia o transacciones persona a persona permitirán a
las operaciones que tendrán lugar a través del canal móvil reducir la
dependencia en las sucursales o cajeros automáticos. Mientras más sean las
transacciones que los bancos pueden mover a los teléfonos móviles, mayor será
la posibilidad de que se puedan cerrar sucursales de bajo rendimiento y
aumentar la eficiencia de operación, así como aumentar los servicios de
asesoramiento personalizado y desarrollar más productos de valor agregado para
ofrecer a los clientes.
La tecnología NFC
permitirá ampliar los servicios del móvil
Los objetos tendrán sensores que
el teléfono celular puede leer para recibir la información y relizar la
transacción. Aunque la tendencia de banca móvil es mayor en Estados
Unidos y Europa, América Latina ya se está metiendo en la onda. Según
Maximiliano Bercum, gerente senior en el área de estrategia y operaciones para
la industria financiera de Deloitte, este es un servicio que va a crecer
rápidamente porque la tecnología está ahí. Portafolio habló telefónicamente con
él, que tiene su oficina en Atlanta. No se va a poder salir sin celular para no
quedar varado.
Cierto. Uno de los beneficios más
fuertes es el hecho de hacer transacciones muy rápidas mientras vas en un metro
o en un bus o estás en un estadio. La tendencia es pagar todo con el celular.
Ya la tecnología existe para
poder hacer las transacciones, el obstáculo que hay es la adopción, pues muchas
entidades y clientes están cómo sin espacio con lo que ya pueden hacer y no ven
la necesidad de cambiar. Esto implica desarrollar aplicaciones o
servicios complementarios a lo que ya se hace (pago de servicios, consulta de
saldos).
¿Qué más se puede hacer
con el celular?
La próxima cúspide de tecnología
Near Field Communication (NFC), un tipo de comunicación inalámbrica que con
sólo poner el celular a diez centímetros de un producto, una puerta o tu carro,
se permite hace una operación, con aplicaciones que bajas al teléfono.
La NFC es una tecnología muy
sencilla que guarda información muy específica que el celular reconoce. Los
objetos tienen el sensor y el celular el chip para leerlos.
¿Qué servicios son los
más frecuentes para acceder por celular? Geográficamente es distinto. En EE. UU.,
además de mucha banca móvil (pagos, transacciones de persona a personas, ver
estado cuenta), ahora también se utilizan mucho las imágenes: tomar una foto al
recibo y hacer pagos por medio del teléfono, por ejemplo.
En Asia y Europa es muy fuerte el
área de pagos. Vas a una máquina que dispensa Coca-Cola, por ejemplo, y la
puedes pagar por teléfono. El celular funciona como tarjeta crédito o débito Y
en América Latina se está comenzado a usar mucho para el movimiento de remesas
o para hacer transferencias de dinero en el sector rural donde la banca no es
muy extendida.
En México, por ejemplo, se está
abriendo mucho en el área de las remesas, pues la telefonía móvil tiene cinco
veces más penetración que el sector bancarizado.
¿Cómo modifica esto a los
bancos?
No van a desaparecer, por el
contrario, es una revolución que les permite hacer lo que siempre han buscado:
dar el mejor servicio posible al cliente, de la forma más efectiva y eficiente.
Puede ofrecer servicios más
personalizados según las necesidades del cliente y proveerle productos más
acordes con su estilo de vida. Las sucursales se volverán sitios para
transacciones más especializadas.
Colombia se pone al
día en banca móvil
Colombia está entrando en el
mundo de la banca móvil poco a poco. Según un reporte de Redeban Multicolor, el
año pasado los colombianos hicieron un total de 15,9 millones de transacciones
por sus celulares, cifra que se espera sea superada este año.
Según esta entidad, más de 30
millones de usuarios de telefonía celular pueden efectuar varias operaciones
como consulta de saldo, recarga de minutos, transferencias y pago de servicios
públicos y privados. Las entidades financieras están firmando convenios
con cadenas de almacenes, restaurantes y empresas de transporte público para
que los servicios de pago por celular se masifiquen en el menor tiempo
posible.
Si bien varios de los servicio de
banca móvil aún no se han popularizado y en algunos casos apenas se están
haciendo las pruebas piloto de algunas operaciones, lo cierto es que manejar la
plata con el celular es el nuevo campo de batalla de las entidades financieras
para conquistar más clientes. Según la Superintendencia Financiera, hoy
el teléfono móvil es el canal menos usado para las transacciones bancarias, al
representar apenas el 0,5 por ciento del total de las estas, superado por las
de las oficinas de las entidades, los cajeros automáticos e Internet, entre
otros.
No obstante, los bancos saben que
ese es el futuro del negocio y ninguno se quiere quedar del tren, pero van
lentamente.