Para Jorge de los Ríos, abogado especialista en derecho de la competencia, la carencia de datos sobre el mercado dificulta la labor de muchas compañías, una situación particularmente grave en un entorno cada vez más competido como este.
Pese al fortalecimiento de la legislación y las autoridades que regulan la
libre competencia en el país y protegen al consumidor colombiano, la falta de
datos de mercado dificulta operaciones que van desde el trazado de estrategias
comerciales hasta la adquisición de compañías locales.
Así lo dice el abogado Jorge de los Ríos, una de las grandes figuras tras los
movimientos empresariales más importantes en la nación. De los Ríos es abogado
de la Pontificia Universidad Javeriana, tiene una maestría en Derecho de la
Universidad de París y ha trabajado durante 15 años asesorando a grandes
compañías en temas legales. Actualmente se desempeña como director de la
práctica de Derecho a la competencia y protección del consumidor, en la firma
Posse Herrera Ruíz.
¿Qué se debería mejorar en los temas de libre competencia y
protección al consumidor?
Hay ciertos aspectos en la legislación que valdría la pena aclarar, como la
necesidad de tener una autorización previa de una transacción que constituye una
integración empresarial. La norma establece las condiciones, pero también genera
vacíos porque somete la necesidad de la aprobación previa a un umbral por
participación en el mercado, que es del 20 por ciento; en un mercado como el
colombiano, donde en muchos sectores hay alta carencia de información pública,
muchas veces a las empresas se les complica saber qué participación tienen.
Entonces, más que las normas, hay aspectos que se dan en el mercado que
dificultan la situación; a veces las empresas no cuentan con información
suficiente para trazar sus estrategias comerciales.
¿Qué le recomendaría a una compañía local que siente que la
competencia se fortalece?
Creo que para las compañías colombianas que innovan y buscan ser cada vez más
competitivas, los TLC representan una oportunidad y una ocasión también para
ampliar sus fronteras. Un TLC condena a desaparecer a las compañías que se
rehúsan a innovar y a ser competitivas.
¿Cómo puede una empresa blindarse en un contexto
globalizado?
Existen herramientas legales para impedir ciertas distorsiones en los
mercados. Por ejemplo, existen las medidas de salvaguardia y los derechos
antidumping, que buscan proteger a la industria local ante el aumento desmedido
de las importaciones o ante la realización de prácticas desleales por parte de
compañías de países extranjeros. Lo que no existe son medidas legales que
protejan a aquella industria local que se rehúsa a innovar.
De otro lado, Colombia tiene empresas fuertes financieramente y con un
capital humano muy capacitado y que han demostrado que está en capacidad de
competir con multinacionales.
¿Qué leyes deberían optimizarse para mejorar las relaciones que se
están creando?
Para mí es de crucial importancia garantizar la libre competencia y la
efectiva protección de los derechos de los consumidores.
En este sentido, Colombia ha mostrado un avance tanto en el desarrollo y
modernización de su legislación como en el fortalecimiento de sus autoridades
encargadas de velar por el cumplimiento de estas normas. La SIC ha mostrado una
capacidad técnica para afrontar estos casos, ha mejorado sus índices de gestión
y se espera que siga con esa tendencia.
La colaboración entre autoridades de competencia será de vital importancia
para el desarrollo de la aplicación de estas normas en el país y, sin duda, esto
representa una garantía para las empresas.
YA SE NOTAN LOS TLC
Aunque muchas compañías reportan aún no sentir por completo los efectos del
TLC con Estados Unidos, De los Ríos dice que sí ha visto un aumento en el número
de organizaciones provenientes de ese país buscando asesoría para adquirir, de
manera parcial o total, empresas en Colombia.
“Estoy convencido de que la apertura de las fronteras trae beneficios para el
país, para la industria, para el desarrollo de este y, por supuesto, para los
consumidores.
Adicionalmente, se obtienen otros beneficios, como diversificar el portafolio
de mercados y no depender de uno solo”, finalizó el abogado.