WhatsApp decidió no prorrogar las licencias gratuitas anuales de Android por lo que los usuarios empezaron a recibir un aviso de caducidad donde explican que deben pagar 0,89 euros al año por el servicio de mensajería.
Muchos son los usuarios a los que se les acababa la licencia en estos días y que en vez de recibir la extensión de licencia gratuita directamente se encuentran con que su licencia ha caducado. ¿La única solución? Pasar por caja. La propia aplicación redirige al usuario al Play Store, donde debe registrar una tarjeta de crédito si no la tiene ya, para que abone los 89 céntimos de euro que cuesta un año de licencia.
Hace un par de semanas otra actualización añadió formas de pago a la hora de renovar nuestra suscripción de WhatsApp si somos usuarios de smartphones con sistema operativo Android.
Se trata de poder realizar el pago de los 0,89 euros a través de la plataforma Google Play. Esto supone evitar el pago a través de Internet con el servicio PayPal, y poder utilizar las tarjetas regalo o el servicio de Google Wallet. Algo que aporta seguridad al usuario y más formas de pago para aquellos que no pueden acceder a una tarjeta de crédito.
La intención es pagar un poco por mantener la aplicación sin publicidad, ya que estos servidores que mueve Whatsapp y su ancho de banda tiene un costo alto.
Pero al pagar los errores de caídas de servicio ya no deben ser asumidos por los usuarios como algo normal. Whatsapp apunta a mejorar su servicio para no perder su posición privilegiada como aplicación de mensajería móvil.
Hace un par de semanas otra actualización añadió formas de pago a la hora de renovar nuestra suscripción de WhatsApp si somos usuarios de smartphones con sistema operativo Android.
Se trata de poder realizar el pago de los 0,89 euros a través de la plataforma Google Play. Esto supone evitar el pago a través de Internet con el servicio PayPal, y poder utilizar las tarjetas regalo o el servicio de Google Wallet. Algo que aporta seguridad al usuario y más formas de pago para aquellos que no pueden acceder a una tarjeta de crédito.
La intención es pagar un poco por mantener la aplicación sin publicidad, ya que estos servidores que mueve Whatsapp y su ancho de banda tiene un costo alto.
Pero al pagar los errores de caídas de servicio ya no deben ser asumidos por los usuarios como algo normal. Whatsapp apunta a mejorar su servicio para no perder su posición privilegiada como aplicación de mensajería móvil.