El país tendrá a finales de este año 8,8 millones de conexiones de banda ancha, un reto que busca reducir la pobreza y aumentar las oportunidades en la "base de la pirámide" social, es decir, las clases más desfavorecidas, a través del uso de las tecnologías.
Así lo dijo el viernes la viceministra de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC), María Carolina Hoyos, en la apertura del foro ‘Un país de oportunidades a través de las TIC’, organizado por la revista Semana en Bogotá.
Esa conexión tendrá, según Hoyos, impacto directo en muchas áreas de negocios y servicios. El objetivo es generar oportunidades para "el 100% de los colombianos", apuntó, y para lograrlo el Gobierno ejecuta con las administraciones locales planes para conectar a las regiones más apartadas, programas cuyo valor total asciende a 267.000 millones de pesos (140,5 millones de dólares).
Sólo en regiones aisladas como Amazonía y Orinoquía los programas en ejecución sobrepasan una inversión de 33.000 millones de pesos (17,3 millones de dólares); mientras que en la Región Caribe es de 61.000 millones de pesos (32 millones de dólares) y en la Región Andina, donde se concentra la mayor parte de la población, la cifra es de 104.800 millones de pesos (55,1 millones de dólares). El resto se reparte en otras zonas del país.
Esas inversiones comprenden la creación de infraestructura, capacitación de capital humano y otras soluciones relacionadas con las TIC, como la creación de empresas que generen contenido para internet.
La viceministra, a cargo del programa "Vive Digital", una de las apuestas del Gobierno, destacó nueve áreas en las que la banda ancha está produciendo y va a producir un impacto para la sociedad y las empresas, que van desde transporte y compras en línea hasta teletrabajo, seguridad y atención de emergencias.
Para finalizar, Hoyos pidió a los asistentes al foro "entender el valor agregado de la tecnología" para resolver problemas y hacer a las ciudades y regiones "más inteligentes y sostenibles".