Por ley, una conexión de banda ancha es de 1 Mbps. ¿Está acorde con las necesidades del mercado?
La denominada banda ancha hace alusión a conexiones que, por su capacidad, admiten el tránsito expedito de altos volúmenes de datos.
Que más del 90 por ciento de las conexiones a internet en Colombia sean de banda ancha suena a que, al menos en este campo, somos un país de avanzada.
La denominada banda ancha hace alusión a conexiones que, por su capacidad, admiten el tránsito expedito de altos volúmenes de datos, una característica muy apreciada en estos tiempos de 'streaming' en alta definición y videojuegos en línea, entre otras aplicaciones.
Sin embargo, la alta penetración de la banda ancha entre los colombianos tiene que ver más con un concepto desactualizado que con la realidad.
El positivo balance en esta materia, actualizado cada tres meses por el Ministerio de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC), contrasta con la limitada capacidad de las conexiones.
El más reciente informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde), club de buenas prácticas de gobierno al que Colombia quiere ingresar, estableció que el 92 por ciento de las suscripciones del país tienen velocidades inferiores a los 4 megabits por segundo (Mbps).
“En la mayoría de los países de la Ocde, salvo México y Turquía, predomina la oferta de banda ancha con velocidades reales superiores a los 10 Mbps”, anota el documento.
Entonces, ¿por qué el Gobierno habla de más de 9,7 millones de conexiones de banda ancha y de un crecimiento superior al 300 por ciento en este rubro, frente a lo registrado en el 2010?
La explicación está en una norma de hace cinco años, que define que en Colombia se habla de banda ancha cuando una conexión tiene velocidades de ‘bajada’ (de información) de al menos 1.024 Kbps y 512 Kbps de ‘subida’.
Por lo tanto, cualquier conexión fija de más de un megabit por segundo es considerada de banda ancha. Si se trata de móviles, todas las conexiones 3G y 4G entran en esta categoría.
Se viene un cambio
El rezago que presenta el país en términos de velocidades de conexión no es un secreto para la industria de las telecomunicaciones. De acuerdo con el presidente ejecutivo de la Cámara Colombiana de Informática y Telecomunicaciones, Alberto Samuel Yohai, “la definición de banda ancha en Colombia está bastante desactualizada”. En su opinión, si bien el país no puede elevar las velocidades mínimas de conexión a los niveles más altos de la Ocde, al menos debería acercarse a la media de las naciones que pertenecen a esa organización (unos 7 Mbps).
Jaime Peláez, presidente para Colombia de la empresa Level 3, proveedor del sector de las comunicaciones que posee redes de fibra óptica en tres continentes, coincide en que “Colombia no puede estar a la vanguardia de los principales países del mundo, pero tampoco se puede quedar atrás; la banda ancha en Colombia debería empezar al menos en 4 megas”.
Una capacidad parecida recomienda José Otero, director para Latinoamérica y el Caribe de 4G Américas, organización empresarial que fomenta el progreso de las tecnologías de banda ancha móvil. “Si se hace la modificación, debe ser en un rango realista y que concuerde con la oferta de velocidades que hay en el país”, opinó el ejecutivo. En su concepto, si Colombia quiere equipararse con los países de la Ocde, el mínimo debería estar en los 10 megas; pero si ese no es el objetivo, el piso actual se podría elevar a por lo menos 5 megas.
David Londoño, gerente de mercadeo de Claro, reveló que el 82 por ciento de los clientes de internet fijo de ese operador usan una conexión de 5 o más Mbps, lo que contrasta con la media del mercado, cercana al 30 por ciento.
“Creemos que este año el impulso a las conexiones de 10 Mbps será la norma. Nuestros estudios muestran que, en promedio, los hogares colombianos usan 3,8 aparatos conectados a su servicio de internet. La gente necesita cada vez más una mejor banda ancha”, afirmó.
No hay consenso
Todavía no existe un consenso sobre cuál debería ser la nueva definición de banda ancha para Colombia. Sin embargo, parece inminente que el Gobierno modifique la regulación actual, para que finalmente el país dé el salto a los niveles de conectividad del mundo desarrollado.
Así lo deja ver uno de los artículos del proyecto de Plan Nacional de Desarrollo 2014-2018, que señala que “la Comisión de Regulación de Comunicaciones (CRC) deberá establecer una senda de crecimiento para la definición regulatoria de banda ancha a largo plazo”.
Al ser consultado sobre el tema, el ministro de las TIC, Diego Molano, explicó que no hay una fecha límite para establecer la nueva definición. No obstante, reconoció que la revisión es necesaria porque el mínimo establecido es bajo.
Así está la oferta local
EL TIEMPO comparó los precios para el servicio de banda ancha fija en los principales operadores de telecomunicaciones del país. En la actualidad en promedio, comparando las ofertas de Claro, Movistar, ETB y UNE, un plan de internet de 5 Mbps en un hogar estrato tres de Bogotá cuesta cerca de 70.000 pesos. Movistar es el único operador que no vende un canal de internet sólo, sino que incluye el servicio de telefonía, por 52.900 pesos. Claro presta el servicio de 5Mbps para estratos 3 y 4 por 50.000 pesos. En el mismo estrato en Bogotá un plan de 10 megas cuesta en promedio 102.400 pesos y la mejor alternativa la ofrece Claro con un plan de 90.000 pesos. Este operador ofrece velocidades de 5, 10, 20, 50 y 100 Mbps. Movistar con capacidades de 2, 5, 9 y 15 Mbps. ETB ofrece paquetes de 20, 40, 70 y 150 Mbps por precios (en combo con TV y llamadas) entre 95.000 y 270.000 pesos en estrato 2.
Todos estos precios fueron consultados en los portales y centros de llamadas de los operadores, pero pueden estar sujetos a cambios, pues la oferta de los operadores es muy cambiante y se acomoda a las temporadas de ventas y promociones que constantemente emiten al mercado.
¿Para qué más banda ancha?
De acuerdo con cálculos de Netflix, servicio de películas en línea que cuenta con más de medio millón de suscriptores en Colombia (según Commscore), el consumo de video se multiplicará por cinco en dos años. De otro lado, el aumento de la penetración en la base de la pirámide social colombiana también presiona las expectativas de capacidad de acceso. En el caso de Claro, “en el último año crecieron 72 por ciento las nuevas conexiones en estratos 1, 2 y 3”, informó el gerente de mercadeo, David Londoño.
El ejecutivo señaló que en el acceso móvil las expectativas son similares: “Muchas personas descubren un internet de banda ancha desde un celular. En diciembre pasado, siete de cada 10 usuarios prefirieron comprar un móvil inteligente antes que un computador para conectarse a la red”.
Camilo Aya, director de mercadeo de Movistar, afirmó que en los últimos nueve años su empresa pasó de 12.000 clientes a un millón e incluyó servicios de valor agregado como Aula 365, para las tareas en casa, así como aplicaciones y servicios para pymes. En su opinión, “Colombia necesita un mayor desarrollo de contenidos y servicios locales que impulsen la adopción de la banda ancha”.