Este gigante tecnológico queda en Bogotá y por primera vez en cinco años abrió sus puertas.
Triara, el centro de datos de Claro, soporta a 100.000 empresas de ocho países de la región.
Colombia tiene uno de los centros de cómputo más avanzados de Suramérica, una de las mayores apuestas tecnológicas que una multinacional del sector ha hecho en el país, y por el que a diario pasan cientos de millones de los datos que los colombianos dejamos en ‘la nube’.
Se trata de Triara, el datacenter de la compañía de telecomunicaciones Claro, que por primera vez en cinco años abre sus puertas para mostrar en detalle el funcionamiento de esta mole de concreto que se ha convertido en un HUB tecnológico que sirve a ocho países de la región.
En su interior, más de 300 profesionales colombianos se encargan de garantizar la operación continua del centro de datos 24 horas al día, siete días a la semana.
Triara está diseñado con las más estrictas especificaciones ante fallas sísmicas, extinción de incendio y seguridad física. Por ejemplo, ante una falla que pueda dejar sin energía al datacenter, la construcción cuenta con tanques de combustible capaces de mantener la operación estable durante al menos cinco días.
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Las plantas eléctricas, que necesitan menos de diez segundos para entrar en funcionamiento, serían capaces de alimentar de energía a una población de unas 25.000 personas.
En el interior de este centro de cómputo se procesan cerca de 2,5 millones de transacciones electrónicas por segundo, entre mensajes de correo electrónico, servicios en la red para pymes y hogares en diferentes países en los que Claro tiene presencia.
Además, cerca de 100.000 empresas usan la infraestructura tecnológica de este datacenter para alojar contenidos e información mediante servicios como ClaroCloud.
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Máxima seguridad
Precisamente, ante la gran cantidad de datos que se albergan en los cientos de servidores con los que cuenta Triara, las medidas de seguridad informática son también de la más alta eficacia.
Desde el Security Operation Center (SOC), un grupo de ingenieros expertos en seguridad informática trabaja para evitar y atender los riesgos propios de la operación. Se estima que al mes se presentan al menos 32 intentos de robos de información, los cuales son controlados desde este datacenter.