Las tecnologías digitales podrían habilitar una importante cantidad de puestos de trabajos. Sin embargo, en los países en desarrollo el sector de las TIC representa aproximadamente solo el 1% del total de trabajadores.
El 60% de la población aún no cuenta con acceso a internet, lo que produce que los beneficios de su impacto no sean los esperados. ¿Cuál ha sido el papel de las TIC en el empleo y el crecimiento? Y ¿Cuáles son los retos y dificultades que enfrenta el sector?
Para finales del año anterior, se estimó que aproximadamente 3.200 millones de personas, tienen acceso a internet. Esta llamada revolución digital ha generado en los últimos años, más facilidades en cuanto a comunicación, obtención de información, productos gratuitos y formas de ocio.
Sin embargo, el Banco Mundial se cuestiona dentro de su investigación, si en realidad las inversiones en las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) han generado un mayor crecimiento, mejores servicios y más empleo.
Se han puesto en duda los beneficios potenciales de esta revolución digital, dado que a pesar de que las personas y los gobiernos están más conectados que nunca, el impacto de la tecnología en la propagación de la gobernanza, en la productividad, en las oportunidades y la desigualdad, no ha cumplido las expectativas ¿Por qué?
Productividad mundial
Fuente Banco Mundial
El Banco Mundial, expone dos factores principales. Por un lado, porque el 60% de la población mundial aún no tiene una conexión a internet, lo que le impide participar de manera significativa en la economía digital. Y por otro lado, porque los beneficios se pueden ver contrarrestados por nuevos riesgos.
¿Cuáles riesgos?
- Información sin rendición de cuentas: Cuando internet ayuda a superar barreras de información, pero los gobiernos no rinden cuentas a sus ciudadanos, se logra un mayor control pero no inclusión de la población.
- Automatización sin habilidades: cuando los trabajadores no poseen habilidades para un manejo adecuado de la tecnología, se genera menor productividad y mayor desigualdad.
- Escala sin competencia: si por el internet las empresas logran economías de escala pero afectan a la competencia y propician monopolios, se genera una excesiva concentración del poder de mercado.
Los aportes de internet al crecimiento y el empleo
En los países en desarrollo, la contribución de las TIC al crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) ha sido pequeña, alrededor de un 1,2%.
Fuente Banco Mundial
Por otro lado, si se da un aumento del 10% en el uso de internet en un país de importancia exportadora, el número de productos comerciados aumentaría 0,4%, según el Banco Mundial.
En cuanto a empleos, las tecnologías digitales podrían habilitar una importante cantidad de puestos de trabajo. Sin embargo, en los países en desarrollo el sector de las TIC representa aproximadamente el 1% del total de trabajadores. En los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde), el empleo generado por las TIC, representa alrededor del 3% al 5%.
¿Cómo enfrentar las dificultades y los riesgos?
“Para que los dividendos digitales puedan compartirse ampliamente entre todos los segmentos de la sociedad, los países también deben mejorar el clima de negocios, invertir en la educación y la salud de las personas, y promover el buen gobierno”, afirmo Jim Yong Kim, presidente del Banco Mundial.
Para que la nueva era digital cumpla con las expectativas y cumpla de manera eficaz la promesa de desarrollo, el Banco Mundial recomienda dos acciones claves:
- Acortar la brecha digital haciendo que Internet sea universal, accesible, abierta y segura.
- Reforzar las regulaciones que garantizan la competencia entre empresas, adaptar las habilidades de los trabajadores a las exigencias de la nueva economía y promover instituciones responsables.