'Finding Rover' ha ayudado a más de 2.000 mascotas en Estados Unidos a reunirse con sus familias.
Los usuarios deben marcar los ojos y nariz en la foto para que luego el sistema se encargue de escanear las características principales.
Dejó a un lado su trabajo durante cuatro días, recorrió su barrio por horas, habló con todo aquel que se le cruzara. El día en que Steve Cox perdió a ‘Roxy’, una perra de 10 años de raza Shiba Inu, su vida prácticamente se detuvo.
En una tarde cualquiera, en 2014, la mascota salió corriendo asustada luego de escuchar un trueno. Cox y su familia salieron en búsqueda del animal. Pegaron carteles en cada calle de su barrio en San Diego, California (EE. UU.), la buscaron hasta el cansancio; pero no tuvieron éxito. Al quinto día de la pérdida, su hija de 10 años de edad decidió subir la foto de ‘Roxy’ en ‘Finding rover’, una aplicación que usa un revolucionaria tecnología para ayudar a que los perros perdidos vuelvan a su hogar, en dicho país.
La plataforma, disponible para Android y iOS, utiliza un sistema de reconocimiento facial, creado con la ayuda del departamento de Software de la Universidad de Utah, que funciona a través de un algoritmo llamado Pet Match. Este usa inteligencia artificial y otros sistemas para reunir las características físicas más importantes de los perros que lo diferencian del resto.
Tanto los propietarios como los ciudadanos que se encuentren una mascota perdida, deben subir una foto donde se vea de forma detallada y clara la figura del animal. El siguiente paso es marcar sus ojos y nariz para que luego el sistema se encargue de escanear las características principales. Una vez la imagen quede registrada, el software le entregará posibles ‘matches’ o coincidencias para que de esta forma el usuario verifique el paradero de su perro.
Así fue como ‘Roxy’ volvió a casa. Debido a la foto cargada, la perrita fue identificada por el Departamento de Servicios de Animales del Condado de San Diego después de llegar a su refugio. Cuatro horas después ya estaba en casa de nuevo.
De hecho, el papel que juegan los albergues, fundaciones, refugios, veterinarias y la ciudadanía en general ha sido trascendental para lograr el éxito de la plataforma, que ya ha ayudado a reunir con sus familias a más de 2.000 perros en Estados Unidos.
El sistema, que envía una notificación o alerta en un radio de búsqueda de 2.000 millas y que tiene disponible un mapa para ver la ubicación exacta, fue inventado por John Polimeno, cuando una tarde en una cafetería vio un cartel con información sobre un perro perdido. Al observar que a su alrededor todos estaban enfocados en sus celulares, se le ocurrió la idea de la aplicación rápidamente.
Polimeno le agregó a la herramienta un botón de un sonido de ladrido para que, por ejemplo, el perro encontrado mire directamente a la cámara y se logre captar la imagen.
“El perro es un miembro de la familia amado, y si él o ella desaparece, puede ser devastador para todos los involucrados. Queremos hacer todo lo posible para proteger a nuestros perros de estar perdido para siempre. Registrar un perro en Finding Rover es otro paso que todos los propietarios deben tomar para proteger aún más a su amada mascota”, dijo Polimeno.
Para muchos de los casos solo se han necesitado un par de minutos para que momentos de pánico y tristeza terminen en finales felices. ‘Pink’, una perra de cuatro años que se perdió mientras su dueña estaba en el trabajo, volvió a su hogar en menos de 24 horas, en Miami, Florida.
Monchichi, un perro de raza Grifón de Bruselas de cinco años, se extravió mientras sus dueños habían salido de la ciudad. Inmediatamente supo la noticia, su propietaria, Laura Steveson, que reside en San Diego, subió una foto de su mascota a la aplicación. A los cinco minutos recibió una notificación en la que se le informaba la presencia del animal en el Departamento de Servicios de Animales.La plataforma solo se encuentra disponible en Estados Unidos, Canadá, Australia y Nueva Zelanda. Sin embargo, sus creadores esperan ampliar el servicio a otros países.