La tecnología, los cambios demográficos y la globalización representan grandes cambios y plantean nuevas formas de consumo para el futuro de las personas y las empresas.
Tras una rigurosa investigación, la firma global EY, presentó el estudio “Megatendencias Latinoamericanas: ¿Qué nos traerá el futuro? Más allá de la disrupción”, en el que plantea las perspectivas para la región, con el objetivo de preparar a las empresas para los cambios.
Estas son las 10 megatendencias que regirán el futuro de Latinoamérica, según EY:
Industria redefinida
Con el auge tecnológico, las empresas están redefiniéndose a través de adquisiciones y fusiones con otras compañías, desarrollando nuevos modelos de negocio y ampliando sus capacidades.
Las jerarquías tradicionales están quedando atrás y la industria ha pasado a ser una red más abierta.
El futuro del trabajo
En un escenario en que las herramientas tecnológicas ganan cada vez más terreno, vale la pena preguntarse ¿cuál será el futuro del trabajo humano? Pues bien, EY plantea que se requerirán nuevas habilidades y especializaciones que hace tan solo 10 años no existían.
De hecho, se calcula que el 65% de los niños que actualmente están en primaria terminarán trabajando en algo que hoy no existe.
Respecto a los procesos de reclutamiento, en el futuro la automatización podrá crear recomendaciones basadas en lo que busca el empleador, enviar currículos optimizados a cada sitio de trabajo, analizar el perfil psicométrico de cada candidato, hacer entrevistas por chatbots, etc.
Súper consumidor
Los consumidores empoderados buscan que las marcas les ofrezcan experiencias diferentes y personalizadas.
Por otra parte, estos consumidores están centrados en la protección de sus datos personales. Por ende, es posible que en el futuro opten por monetizar su propia información e intercambiarla con otros servicios.
Diseño del comportamiento
La inteligencia artificial pretende, en un futuro, detectar cómo se sienten los seres humanos y responder como consecuencia ante esto.
Regulación adaptativa
Además de la economía colaborativa, tendencias como los vehículos autónomos y el uso cada vez más frecuente de drones, requerirán de una completa revolución en las normas e infraestructura.
Rediseño del urbanismo
Las urbanizaciones del futuro pueden lucir totalmente diferentes, gracias a los desafíos de la sostenibilidad, los problemas de salud pública y el transporte dentro de las ciudades.
Comunidades innovadoras
Se calcula que en 30 años, la mayoría de la población mundial vivirá en la urbe; sin embargo, ya no serán grandes, sino pequeñas y medianas ciudades, con diversos beneficios para sus habitantes.
Estos cambios estarán motivados por los límites de crecimiento de las mega-ciudades, la contaminación, la escasez de recursos, entre otros factores.
Salud reinventada
Para el 2050, se estima que va a haber más de 2.000 millones de personas mayores de 60 años. Por lo tanto, ese envejecimiento de la población y los estilos de vida sedentarios transformarán los servicios de salud.
En el futuro, las empresas de todos los sectores desarrollarán productos con algoritmos para mejorar la salud de las personas y estas podrán hacer un mejor seguimiento de su estado a través del uso de tecnologías disruptivas.
Comida a la medida
La innovación en la industria alimentaria se centra en la producción de carnes vegetales y sustitutos lácteos que ofrecen el sabor y la experiencia real.
En línea con esta megatendencia, el informe de EY plantea que en un futuro habrá granjas verticales habilitadas digitalmente, para permitir que los alimentos se cultiven cerca de la fuente de demanda.
Con el objetivo de cuidar la salud de los seres humanos, la tecnología también permitirá realizar un diagnóstico que analiza el ADN del bioma intestinal y así detectar los alimentos más apropiados cada persona.
Economía molecular
La nanotecnología, que permite el diseño de la materia a nivel de átomos o moléculas, posibilitará imprimir edificios en 3D, crear objetos con mayor calidad, y el ensamblaje de grandes piezas dirigido por software.
Según Rice University, citado por EY en su informe, el mercado global de nano medicina en 2025 puede tener un valor de US$ 352 mil millones.