Eduardo Soto, consultor senior de Scrum Master, y Mauricio García, especialista de UX Agile
Aplica metodologías de trabajo como Scrum junto a herramientas de experiencia al usuario para romper paradigmas y entregar valor a tu cliente final
¿Qué sabes de Netflix, Spotify, Uber o Facebook? Las anteriores son empresas denominadas Unicornio, nacieron con poco presupuesto, pero que ahora tienen ingresos multimillonarios y lideran la disrupción digital a pesar de que no son compañías dedicadas al giro tecnológico ¿Cuál es su fórmula del éxito? Entre otras cosas, expertos opinan que se debe a que emplean metodologías de trabajo como Scrum alineadas a herramientas de experiencia al usuario.
El sistema Scrum es un marco de trabajo para gestionar proyectos en entornos complejos, colaborativamente y con base en un conjunto de buenas prácticas; es útil para entregar valor al cliente final y sirve para resolver situaciones en que no se entrega el servicio que necesita el consumidor o la calidad no es aceptable.
Un ejemplo de esta metodología es la división interna en los equipos de una organización por células de trabajo, así se genera valor en forma escalable y no al estilo horizontal, destacó Eduardo Soto, consultor senior de Scrum Master en Sngular.
“Empresas como Google tienen una idea que diseñan, ejecutan y la implementan rápido para que en cuestión de tiempo saben si funciona o no, el valor que aporta no es tanto un enfoque monetario, sino una aprendizaje para ir un paso adelante”, explicó Soto.
La experiencia de usuario, por el contrario, se sustenta por medio de una serie de entrevistas, observaciones e investigación de mercado que reconoce las necesidades del consumidor en relación a lo que una empresa ofrece como un producto o servicio, de ahí pueden tomar decisiones para mejorar la oferta, indicó Mauricio García, especialista de UX Agile en Sngular.
En México son las entidades del sector financiero como fondos de ahorro y bancos quienes apuestan por estas metodologías para responder al usuario inmerso en la Transformación Digital, sin embargo, ambas disciplinas pueden aplicarse a todo tipo de compañías y en cualquier departamento interno como ventas, recursos humanos, sistemas, productos, entre otros.
Los ejecutivos indicaron que las metodologías son complejas, por ello se requiere disciplina una vez implementadas dentro de una organización como reorganizar la estructura interna, así como hacer nuevas inversiones en tecnología y personal capacitado para proyectos que pueden durar de dos meses a un año.
El proceso es medible, ya que los resultados pueden validarse para seguir la estrategia actual o hacer el cambio necesario. El no romper paradigmas significa quedarse en lo mismo y dejar que la competencia sí dé ese salto, coincidieron los especialistas.