Sergio Loza, líder de Ventas de la Plataforma Cloud de IBM en Latinoamérica
Kubernetes es la oferta de IBM en materia de contenedores; es calificada como la evolución de la nube y código abierto
Pensemos en que el negocio de su cliente requiere evolucionar en servicios para seguir siendo competitivo. Digamos que este cliente es una aerolínea, que ya tiene una aplicación a través de la cual los usuarios pueden comprar tickets, pero quiere mejorar sus servicios y dejar que los usuarios cambien sus asientos desde la misma app, o modifiquen la fecha de su reservación, y los desarrolladores no tienen meses para trabajar en ello, sino que disponen apenas de un par de semanas. Una opción para poner manos a la obra es a través de microservicios en contenedores de IBM, Kubernetes.
Kubernetes es, en opinión de Sergio Loza, líder de Ventas de la Plataforma Cloud de IBM en Latinoamérica, el siguiente paso en la evolución de la nube y los estándares abiertos. Un contenedor es un ambiente propicio para el desarrollo y orquestamiento de miles de microservicios.
La característica de los contenedores de IBM es que no se pierde el control de un ambiente productivo, independientemente de si se trata de un banco, una empresa grande, aerolínea, con miles de contenedores, porque se pueden poner diferentes instancias en un data center o en otro. En este sentido, Loza explicó que la red de IBM cloud se soporta en 50 centros de datos repartidos por el mundo, uno de ellos en Querétaro, para los clientes que requieren servicios locales.
La información puede residir también en los centros de datos de terceros y en la nube privada de los clientes, cada una con sus políticas de privacidad.
Así como antes se levantaban máquinas virtuales, hoy se habilitan contenedores virtuales pues es más sencillo para el cliente utilizar esos contenedores para desarrollar sus aplicaciones o microservicios, en lugar de construir desde cero una infraestructura y configurarla.
Con kubernetes, el canal podrá diseñar y controlar a dónde van esos microservicios de manera centralizada, puede incluso estar en un ambiente multinube y gestionar un desarrollo en varias nubes, para ver su comportamiento como aplicación.
“Con microservicios en kubernetes, se cambia la manera en que se producen aplicaciones, pues ya no se construyen de una sola vez, ni se pierde tiempo haciendo pruebas, sino que reparte la aplicación en microservicios y cada grupo o squad es dueño de una parte de la aplicación de manera independiente, aunque juntas funcionen como un todo”, explicó Loza.
Estimó que el mercado global para kubernetes tiene un valor de un trillón de dólares. En México, si bien hay un 20% de empresas moviéndose en la nube, es un porcentaje que ya requiere aplicaciones más sofisticadas, aunque no quitó la mira a ese 80% de empresas que no se han subido a ninguna de las modalidades de la nube.
Kubernetes se vende en México a través de canal, que podrá utilizarlos en proyectos financieros y de gobierno, sobre todo.
El servicio se vende como una suscripción de cloud, de la misma manera que se adquieren los servicios de nube o Watson.
“Esta tecnología es prácticamente nueva, tenemos apenas tres años con ella y ya tenemos varios clientes en México y Latinoamérica: bancos, tiendas de retail, aerolíneas que han visto que con esa capacidad de desarrollo tienen más ventajas competitivas en sus propios mercados”, refirió Loza.