Desde 2011 llevamos oyendo que llega la ola del ecommerce alimentación y hemos visto cómo se ha llevado ya a muchos por delante este sector sin coger la ansiada ola, el último en anunciarlo ha sido Amazon, que cerrará Pantry en España el próximo mes, pero antes fueron Alice y Tudespensa.
Pero a raíz de la crisis del coronavirus podemos decir que ya ha llegado la ola. El problema es que la ola se ha formado demasiado rápido y pocos la han podido atrapar. Los que hacéis surf sabéis bien que una gran ola si no la ves venir con tiempo o te arrasa o simplemente no la puedes coger y es lo que les ha pasado a la mayor parte de player. Unos han tenido que cerrar o adaptar sus plataformas online, pero todos se han visto desbordados en su capacidad logística y han perdido miles de oportunidades de venta y de capturar nuevos clientes.
¿Habrá sido una ola aislada y pasajera o ha venido para quedarse?
Es difícil saber aún, ya que ni siquiera está claro cuánto va a durar el riesgo de contagio y el distanciamiento social, pero algunas cosas que hemos aprendido:
Muchos clientes han comprobado que comprar alimentación online es posible, incluso producto fresco, y la satisfacción general ha sido alta. Aunque aún no hay estudios generales pero basándome en los datos de comefruta.es:
Más del 50% de los clientes NUEVOS ha hecho más de un pedido en este período
De los que han repetido casi el 60% afirma haber descubierto una forma de comprar más cómoda y mejor calidad con lo que tiene intención de seguir comprando pasada la crisis.
Por no estar preparado en general el sector hemos perdido una oportunidad de generar una buena experiencia de compra online en muchos clientes.
Se ha comprobado que el modelo de venta online de alimentación no puede ser una réplica del modelo tradicional, ni en cuanto a la propuesta de valor en la venta ni en cuanto a la operación logística.
Y por otro lado si tienes una empresa / marca de alimentación te dejamos el video completo explicando como determinar los objetivos, estimar las fuentes de tráfico y generar una cuenta de explotación antes de lanzarte al ecommerce (o para revisar el que ya tienes).