El mercado mundial de ciberseguridad aumentó un 9,7% interanual en el primer trimestre de 2020.
El mercado mundial de ciberseguridad aumentó un 9,7% interanual en el primer trimestre de 2020, ya que las inversiones se vieron impulsadas a finales del trimestre por las organizaciones que aseguraban a los nuevos trabajadores remotos en las primeras etapas del cierre en respuesta a COVID-19.
La inversión total alcanzó los US $ 10.400 millones, que incluye seguridad de red, seguridad de punto final, seguridad web y de correo electrónico, seguridad de datos y análisis de vulnerabilidad y seguridad. Cisco fue el proveedor líder de ciberseguridad durante el primer trimestre, representando el 9.1% de la inversión total.
Palo Alto Networks siguió siendo su rival más cercano, con una participación de mercado de 7.8%. Fortinet mantuvo su impulso y aumentó su participación al 5,9%. Check Point fue el cuarto proveedor más grande, representando el 5.4%, mientras que Symantec completó los cinco principales proveedores con el 4.7%. Pero el crecimiento de la ciberseguridad estará bajo presión a medida que se reevalúen los presupuestos de TI para dar cuenta del empeoramiento de las condiciones económicas. Esto a pesar de la importancia de proteger los activos de datos, las operaciones y los empleados de las organizaciones del aumento de las amenazas y vulnerabilidades. En consecuencia, los aumentos previstos en el gasto en ciberseguridad en los próximos 12 meses se reducirán o se detendrán por completo.
"El cambio sin precedentes al trabajo remoto desde marzo resultó en una fuerte demanda de seguridad de punto final para proteger las nuevas computadoras portátiles implementadas por la compañía, así como los dispositivos de propiedad del consumidor utilizados como parte de las medidas de continuidad del negocio", dijo Matthew Ball, analista jefe de Canalys. “Los envíos de seguridad de punto final aumentaron 16.9% para representar el 15.4% del mercado total de seguridad cibernética. Este fuerte crecimiento continuó en el segundo trimestre, a medida que más países implementaron medidas de bloqueo. Pero la seguridad de la red solo creció un 4.0% ya que el negocio de dispositivos de hardware para algunos proveedores se vio afectado por las restricciones de la cadena de suministro. Además, muchas organizaciones pudieron utilizar mejor el acceso a la red existente a través de compromisos de servicio o aumentar la capacidad a través de licencias adicionales en lugar de construir una nueva infraestructura de seguridad de red. La seguridad web y del correo electrónico creció un 13,8% interanual a medida que las organizaciones continuaron expandiendo su uso de servicios basados en la nube y aplicaciones de software como servicio, incluido Office 365 ".
Los proveedores de ciberseguridad respondieron rápidamente a la crisis, permitiendo a las organizaciones asegurar temporalmente a los nuevos trabajadores remotos y devolviendo la visibilidad y el control después de que muchos pasaron por alto las políticas para garantizar la continuidad.
Cisco extendió licencias gratuitas para sus productos Umbrella, Duo Security y AnyConnect Secure Mobility Client a clientes existentes y nuevos. También anunció su Programa de Resiliencia Empresarial de 2.500 millones de dólares para mantener saludable su cartera. Palo Alto Networks lanzó su brazo de servicios financieros para ofrecer condiciones de pago extendidas, además de pruebas gratuitas de 90 días para sus ofertas de GlobalProtect. Juniper Networks proporcionó pruebas gratuitas de su vSRX a los clientes para ampliar la capacidad del firewall, así como pruebas gratuitas de AppSec, IPS y SecIntel. Bitdefender apuntó su oferta de acceso gratuito de 12 meses a las organizaciones de atención médica, mientras que Kaspersky también hizo que sus ofertas de Endpoint Security y Hybrid Cloud Security estuvieran disponibles de forma gratuita para el sector. Trend Micro proporcionó su producto Maximum Security gratis durante seis meses a los trabajadores que tenían que usar sus propios dispositivos. McAfee ofreció licencias de ráfaga de tres meses a corto plazo para sus productos de punto final, DLP, Unified Cloud Edge y CASB.
"Los proveedores que se apresuraron a apoyar a los clientes existentes y nuevos durante el cierre de la operación serán los que más se beneficien una vez que las organizaciones reevalúen y prioricen sus estrategias de ciberseguridad", dijo Ketaki Borade, analista de Canalys Research. “Los trabajadores estarán más descentralizados y trabajarán desde múltiples lugares de trabajo después de COVID-19. Esto tiene implicaciones para el tipo de soluciones de ciberseguridad necesarias, con un mayor énfasis en la seguridad de la nube, la confianza cero y la automatización de políticas. Pero es poco probable que el gasto en ciberseguridad esté completamente protegido de los recortes presupuestarios, ya que las organizaciones se adaptan a las condiciones fiscales en deterioro”. Se espera que las tasas de crecimiento se desaceleren durante el resto del año, y en 2021, aunque habrá cierto aumento en ciertos sectores a medida que caduquen las pruebas gratuitas y los clientes cambien a ofertas pagas. Los grandes proyectos ya están siendo analizados, causando demoras, mientras que la demanda de las pymes cayó desde mediados del segundo trimestre. Menos pagos iniciales para contratos de varios años serán otro factor en los próximos trimestres, aunque muchos proveedores ya han cambiado gran parte de su negocio a modelos de suscripción más predecibles.
“El cambio de crecimiento alto a bajo afectará a todos los proveedores. Los proveedores respaldados por capital privado buscarán reducir aún más los costos, mientras que las nuevas empresas acelerarán sus planes de salida, ofreciendo a los proveedores más grandes oportunidades para adquirir tecnología emergente y acelerar sus estrategias. Los socios de canal y los clientes tendrán que evaluar cuidadosamente los proveedores con los que trabajan, en términos de soporte e inversión para satisfacer sus necesidades en constante evolución”, dijo Borade.