Descubre por qué una gestión de datos eficaz es una prioridad ineludible para las empresas que quieren hacer trabajar la información potenciando el negocio
El aluvión de datos que reciben y almacenan las empresas hoy es sin lugar a dudas una oportunidad de tomar decisiones inteligentes basadas en datos, de ganar eficiencia y excelencia operativa. Al mismo tiempo puede resultar abrumador para muchos. En este contexto, ¿por qué una gestión de datos eficaz es la respuesta que todavía algunos ignoran?
Ya no quedan dudas del valor de los datos y de ser una empresa data-driven, incluso se observa una tendencia general en las empresas a reconocer que la gestión de los datos debe ser una prioridad de inversión por el impacto que ello tiene en los resultados de negocio.
Las empresas data-driven tienen 58% más probabilidades de conseguir los objetivos de ingresos que aquellas que no.
Los resultados de una encuesta llevada a cabo por Experian a 1.200 empresas estadounidenses de todos los tamaños ha detectado una mayor preocupación acerca de la posibilidad de que los problemas de calidad de datos puedan afectar a distintas áreas de la empresa, como la toma de decisiones estratégicas o el control de costos.
La mentalidad detectada por el estudio, titulado "How to make your data work harder", sigue una lógica muy particular, que entiende la conveniencia de los datos de calidad no tanto a partir de sus potencialidades sino más bien como resultado de una actitud previsora, para evitar o minimizar efectos adversos en el negocio.
En concreto:
El 88% de los encuestados opinó que la mala calidad de los datos tiene un impacto directo en los resultados. Sólo el 12% de ellos pensaba que afectaba negativamente a la gestión de los datos.
Las estrategias de calidad de los datos inefectivas
El mismo estudio revelaba que la falta de efectividad de las estrategias de calidad de datos en marcha es el denominador común:
El 99% de las empresas encuestadas dijeron contar con una estrategia de calidad de datos. Pero, de ellos, el 91% reconoció que ésta no les evita las dificultades en cuestiones realmente básicas en torno a la calidad de los datos, como son los datos de contacto.
Con respecto a los denominados daños intangibles, como pérdida de reputación o, por ejemplo, el daño a la imagen de la empresa en su servicio al cliente, el 28% reconocieron haber tenido problemas, mientras un 21% dijo haber visto menoscabada su reputación debido a los datos de mala calidad.
Priorizar la gestión de datos, clave del éxito
Las empresas concentran sus esfuerzos en mejorar los datos para lograr una vista 360 del cliente y del negocio, una orientación que la consultora interpreta como una preocupación lógica por el profundo impacto que esto puede tener en muchos indicadores clave de rendimiento en los negocios.
Una gestión de datos eficaz provee a los negocios con información relevante, disponible, accesible y confiable para todos los usuarios.
En un escenario todavía marcado por la crisis resultado de la pandemia, donde los negocios se siguen reinventado y adaptando a un mundo digital-first, no invertir en datos es avanzar casi a siegas en un mundo cada vez más competitivo, dejando pasar la posibilidad de supervivencia a largo plazo.