En enero del 2014 se instalarán unas 10.000 máquinas cazahuellas para quienes ingresan a votar.
Las elecciones legislativas y presidenciales del próximo año tendrán dos novedades: la identificación electrónica de las huellas de 10 millones de electores y la obligación de que en las listas haya, al menos, el 30 por ciento de mujeres.
Bajo estos parámetros, la Registraduría avanza desde hace varios meses en la organización de los comicios del próximo año, los cuales, según cifras de la entidad electoral, costarían alrededor de 569.000 millones de pesos.
Según Alfonso Portela, registrador delegado para lo Electoral, en enero del 2014 se darán a conocer los sitios en los cuales se instalarán unas 10.000 máquinas cazahuellas, que servirán para identificar biométricamente a los electores en el momento de ingresar a votar.
“Esto ayuda a combatir las suplantaciones. Un jurado no se puede inventar votantes porque fácilmente se pueden hacer verificaciones con las máquinas y podemos saber qué personas votaron en cada mesa. No nos pueden aparecer electores fantasma”, dijo Portela.
La idea es que, al llegar al puesto de votación en el cual está la mesa que corresponde al sufragante, este se encuentre con una máquina en la cual le cotejarán la huella para comprobar que efectivamente le corresponde votar en ese lugar.
La otra novedad la trae la Ley 1475, del 2011, la cual reglamentó la reforma política del 2009 y fijó nuevas reglas para las elecciones.
En esta norma, que solamente se ha aplicado en los comicios regionales del 2011, se determina que el 30 por ciento de las listas a Senado y Cámara deben estar conformadas por mujeres.