La última tableta de Lenovo cuenta con un diseño sobresaliente y único, pero cojea en rendimiento.
El proyector incorporado en el cilindro de la Lenovo Yoga Tab 3 Pro puede ser una opción para ejecutivos, pero no ofrece la nitidez y luminosidad de soluciones profesionales.
Lo mejor: Se diferencia de la competencia gracias a su diseño único. Los acabados son de alta calidad. El proyector ofrece una calidad de imagen aceptable y puede resultar útil para los consumidores. El sistema de sonido ofrece una grata experiencia.
Por mejorar: La tableta es pesada y gruesa en comparación con la competencia. El rendimiento podría ser mejor. El proyector demanda un entorno muy oscuro para desplegar una imagen nítida.
8,0
Bueno
El mercado de las tabletas peca por su poca innovación. En una categoría marcada por el estancamiento y la poca creatividad, la Lenovo Yoga Tab 3 Pro se destaca.
Esta tableta goza de una construcción única. Cuenta con un soporte desplegable que permite ubicarla en diferentes posiciones: recostada, en sentido horizontal o en sentido vertical. En la cara trasera, destaca su forraje en cuero. En el extremo inferior, dispone de una manija cilíndrica que facilita el agarre y el uso con una sola mano.
En dicho cilindro se ubican las baterías y, en uno de los extremos, acopla un proyector capaz de desplegar una imagen de 70 pulgadas a resolución de 480p. El punto débil de este proyector es que requiere de un entorno muy oscuro para ofrecer la mejor calidad de imagen y dista de ofrecer la nitidez de soluciones profesionales.
La construcción en metal y aluminio dota al producto de solidez. Sin embargo, es pesado (667 gramos) y grueso (4,68 mm) si se lo compara con productos de la competencia como la Galaxy Tab S2 (389 gramos y 5,6 mm) o el iPad Air 2 (437 gramos y 6,1 mm). A sus virtudes, se añade que soporta salpicaduras de agua y resiste el polvo.
La pantalla de 10,1 pulgadas despliega colores brillantes a resolución de 2.560 por 1.600 píxeles. El sistema de sonido es sobresaliente y el software Dolby Atmos garantiza una experiencia sonora que excede las expectativas.
La batería es otro punto fuerte: dura alrededor de 10 horas. Con uso continuo del proyector, llega a entre 6 y 7 horas. El rendimiento es el punto débil. No es una tableta rápida. Sus capacidades la ubican como un producto de gama media. Cojea cuando ejecuta aplicaciones exigentes o cuando se abren varios procesos al tiempo.
Su procesador, un Intel Atom X5, y su memoria RAM, de 2 GB, no son suficientes para correr con fluidez juegos como 'Real Racing 3' o 'Asphalt 8'. Otro aspecto que se podría mejorar es la capacidad de almacenamiento: 32 GB de fábrica son apenas aceptables para una tableta.
La cámara trasera tiene un sensor de 13 MP y la cámara delantera tiene un sensor de 5 MP. Equipa Android 5.1. Además, dispone de una ranura para tarjetas SIM 4G y otra para expandir el almacenamiento hasta 128 GB.
En conclusión, es una tableta con diseño y características únicas, cuyo rendimiento la ubica como una opción idónea para usuarios del mercado corporativo, pero no es la opción ideal para aquellos que quieran ejecutar aplicaciones exigentes o juegos.
Resumen técnico
Pantalla: 10,1 pulgadas 2560 por 1600 pixels
Tamaño: 24,7 cm de ancho x 17,9 de alto
Grosor: 4,68 mm en su punto más delgado.
Cámara principal: 13 MP
Cámara delantera: 5 MP
Procesador: Intel Atom X5
Memoria: 2 GB
Almacenamiento: 32 GB
Batería: 10.200 miliamperios
Precio: 500 dólares