Se conoce a menudo como la regla de las tres. Se trata de un
principio que sugiere que las cosas que vienen de a tres son más atractivas,
satisfactorias o efectivas.
Nos demos cuenta o no, cuando se ofrecen tres cosas, muchas
personas han sido condicionadas a creer que la opción del medio a menudo es la
mejor.
Los proveedores de
tecnología vienen insistiendo en esta regla desde hace tiempo y se ha vuelto
casi una práctica estándar empaquetar productos y servicios en tres grupos
simples: bueno, mejor y óptimo. ¿Adivine cuál es el más popular? El del medio.
Muchos de nosotros observamos la versión de gama baja, el
paquete bueno, y decidimos que simplemente es demasiado básico. Y como siempre
tratamos de controlar los gastos, la versión de gama alta, o la opción óptima,
podría ser más de lo que necesitamos.
Pero ¿qué pasa con la del medio? A menudo se ve simplemente bien.