Después de un año en pleno crecimiento, el sector de oficinas está en espera. El futuro depende de si las personas siguen en casa
El comportamiento del mercado de oficinas venía con una tendencia al alza en 2019 a nivel general en el mercado, una tendencia que se frenó este año por cuenta de los efectos que deja la pandemia del covid-19.
Hagamos primero un diagnóstico antes de analizar lo que pasa hoy en día. Según Colliers, Bogotá registró en 2019 las transacciones más relevantes del año. En el tema de precios, esta ciudad es la que registra los valores más a altos a nivel nacional para la venta, mientras que el precio promedio más bajo (para alquiler) estaba en Barranquilla, con un costo de $36.600 por metro cuadrado, un 10% menos que la cifra del cuarto trimestre de 2018.
Por causa de la pandemia son varios los cambios que debe asumir este sector. El primero, y más inmediato, es entender la nueva necesidad de los clientes: el método de trabajo presencial cambió a home office y teletrabajo por cuenta del aislamiento preventivo obligatorio y ante esto se espera que al cierre del año, 50% de la fuerza laboral en el país esté en el mundo digital. Esto, ha generado un aplazamiento en la ocupación de los espacios de oficinas, que venía con una tendencia hacia el alza y con altos índices de ocupación.
“El mercado se encuentra en una buena situación. Aunque no estamos viendo un decrecimiento, por el momento, en los precios, sí hemos visto varias renegociaciones. Seguramente, habrá varias liberaciones de espacios, pero creemos que no va a ser el común de las operaciones en las empresas. Por ejemplo, hemos visto algunas variaciones importantes en el modelo de coworking”, dijo Santiago Vicaria, director de Innovación y Mercados de Colliers.
Sobre este tema, la firma resaltó que durante la pandemia algunos coworking han reducido sus precios hasta en un 40% para ganar nuevos clientes, debido a que se ha visto una desaceleración en la ocupación de espacios en comparación con 2018, año en el que se observaban edificios completos ocupados por empresas.
“Hay que entender que el modelo del coworking ofrece tres componentes importantes para las empresas: flexibilidad en las adecuaciones, flexibilidad en el diseño de las oficinas y flexibilidad en términos comerciales y creemos que muchas empresas estarán atraídas por estas características en el negocio de las oficinas, esto, en un escenario poscovid”, afirmó Jean Baptiste Wettling, country manager de Jones Lang LaSalle.
Las firmas consideran que hay algunos fenómenos que presentan las empresas en relación con los espacios compartidos en la actualidad.
“Se plantea que las empresas actualmente están en una búsqueda de generar una mayor liquidez y flujo de caja, más aún cuando debido a la pandemia los ingresos no son los mismos y existe un estancamiento en la economía. Es allí cuando algunas empresas, que actualmente pagan el arriendo de una oficina tradicional, pueden estar optando por trasladar sus operaciones a un modelo flexible de oficina”, resaltó Vicaria.
Otro escenario que se analiza es el modelo home office, donde se prioriza la seguridad de las personas. “Es probable que las compañías adopten estos modelos, ya que estos pueden ser los mejores adaptados para el manejo de la emergencia”, destacan en Colliers.
El covid-19 ha impactado en la industria debido a que las empresas no están utilizando las oficinas o se encuentran cancelando o renegociando contratos con sus oficinas tradicionales o con las marcas de coworking.
Si bien no se ha movido aún el mercado de precios de oficinas, los modelos enfocados en emprendedores, pequeñas y medianas empresas presentarán el mayor número de cancelaciones, mientras que las empresas grandes reducirán sus áreas.