En el mundo empresarial latinoamericano muchas organizaciones sienten que la tecnología avanza demasiado rápido, y justo en los momentos en que logran estabilizar sus procesos, aparece un nuevo tipo de dispositivo que promete cambiarlo todo: las PCs con inteligencia artificial integrada. Quizá su empresa está en ese punto: ha migrado a la nube, tiene políticas de ciberseguridad y automatización básica, pero ahora se enfrenta a la pregunta clave: ¿vale la pena adoptar una “AI PC” aquí y ahora, o es un lujo para grandes corporaciones? Desde mi experiencia de más de treinta años acompañando empresas de Colombia y la región, he visto que las decisiones tardías generan costos de relevo y desventaja competitiva. En este blog quiero compartirle cómo los estudios más recientes —incluyendo un informe de Intel Corporation— muestran el estado de las AI PCs en Latinoamérica, qué significa para su negocio, cuáles son los riesgos de quedarse al margen y cómo puede aprovechar la ola para que su empresa no solo se adapte, sino lidere.
👉 LEE NUESTRO BLOG para descubrir cómo transformar esa inquietud en una ventaja real.
Ahora bien: ¿qué sucede en Latinoamérica? Un artículo del medio ITseller, que recoge los resultados del estudio de Intel e IDC IT Maturity for AI Adoption 2025 señala que el 58 % de las organizaciones están desarrollando iniciativas de IA tradicional y el 54 % han activado proyectos de IA generativa, mientras solo el 14 % trabaja con agentes autónomos. Asimismo, entre las principales barreras aparecen la falta de inventario de datos gestionables (21 %-23 % no tienen inventario), infraestructura limitada, habilidades especializadas escasas y entornos regulatorios en evolución. Esto pinta un panorama: las AI PCs pueden generar impacto, pero el éxito depende de una preparación previa. En Colombia específicamente, aunque no siempre se encuentra el desglose, al estar entre los países denominados “adoptantes” por Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) en su índice ILIA 2025 ―junto con Ecuador, Costa Rica y República Dominicana― el país avanza, pero aún debe cerrar brechas importantes.
Para una empresa colombiana que dirige la transformación, las preguntas son claras: ¿qué valor pueden aportar las AI PCs ahora mismo?, ¿cómo afecta a mi estrategia digital al horizonte 2026-2030?, y ¿cómo no caer en la trampa de “tecnología por tecnología”? Hemos definido en la visión estratégica de mi firma, TODO EN UNO.NET S.A.S., para ese período 2026-2030, un enfoque de tecnología por funcionalidad, donde el dispositivo se convierte en herramienta, no en fin. Desde esa óptica, las AI PCs se valoran cuando apoyan procesos críticos: análisis de datos operativos en tiempo real, mejora de productividad del personal, seguridad de endpoints y escenarios híbridos con edge + nube. El informe de Intel ya lo subraya: “extender la eficiencia de TI, proteger datos sensibles y reducir costes a largo plazo” son motivadores clave.
Veamos algunos ejemplos reales: una empresa manufacturera en Bogotá que integró equipos con NPU (Neural Processing Unit) local para supervisar líneas de producción y detectar anomalías antes de que generaran paros; una firma de servicios legales que migró a AI PCs para transcripción inteligente, segmentación de documentos y análisis de riesgo con menor latencia; un despacho de contabilidad que cambió laptops tradicionales por equipos AI-ready para acelerar dashboards, simulaciones y mejorar la experiencia de sus clientes. En todos los casos, el factor decisivo no fue el hardware per se, sino el diseño del proceso, la capacitación del equipo, la seguridad de los datos y la gobernanza del uso. Si usted adopta AI PCs sin esa capa funcional, corre el riesgo de tener cambio de equipo pero sin cambio de resultado. En Latinoamérica, precisamente, el principal obstáculo es la falta de talento especializado, infraestructura adecuada y gobernanza de datos. El estudio de IDC/Intel menciona que la mayoría de las organizaciones no tiene aún inventario completo de sus activos de datos listos para IA.
¿Qué significa esto para el ahorro, la eficiencia y la competitividad de su empresa? Primero, la reducción de latencia al operar IA localmente en el dispositivo permite decisiones más rápidas, sin depender exclusivamente de conexión a la nube. Esto es clave en oficinas remotas, sedes descentralizadas, o en escenarios donde la privacidad es crítica. Segundo, la combinación de hardware optimizado con modelos ligeros permite que el equipo humano tenga tiempo para tareas de alto valor, liberando al personal de rutinas repetitivas. Tercero, la seguridad mejorada: equipos diseñados con IA interna pueden detectar comportamientos anómalos en el endpoint, cifrado local más ágil y menor exposición de datos al exterior. Pero todo esto viene con un “pero”: la inversión, la formación del personal y la estrategia de integración requieren diseño. Según Precedence Research, el mercado global de AI PCs pasará de 58 000 millones de dólares en 2025 a unos 281 000 millones en 2034, con una CAGR del 19,15 %. Esto también significa que los grandes fabricantes (hardware, software, servicios) aceleran; una empresa que espera mucho podría quedar fuera de la ola.
En Colombia y la región, conviene entonces plantear una hoja de ruta funcional que contemple etapas. Primero, la evaluación del entorno actual: ¿tiene su empresa laptops con NPUs o hardware IA-ready? ¿Qué porcentaje del personal tiene acceso a tareas que se beneficiarían de IA en dispositivo? ¿Y su empresa cuenta con políticas de seguridad, datos y compliance que permitan tal salto? Luego, la estrategia de integración: aquí se trata de unir procesos, tecnología, personas y normas. No basta con comprar el equipo más moderno; hay que preparar al equipo, definir casos de uso concretos (por ejemplo: automatización de reportes, análisis de cliente, mantenimiento predictivo) y asegurar que los datos estén listos. Y en tercer lugar, el despliegue y seguimiento: monitorear resultados, ajustar la solución, gestionar el cambio cultural, medir mejora de productividad, coste y cumplimiento normativo. En mi experiencia en TODO EN UNO.NET, he visto que aquellas organizaciones que abordan el cambio desde esta perspectiva funcional obtienen resultados sostenibles y evitan desperdiciar inversión en tecnología que no genera valor.
Ahora bien, ¿cuáles son los retos que debe tener presentes antes de adoptar AI PCs en su empresa en Colombia? El primero es el coste: el hardware con capacidades IA integradas cuesta más que un equipo tradicional, y el retorno de inversión puede tardar si no se define claramente el caso de uso. El segundo es la conectividad y la infraestructura: aunque parte del procesamiento se hace en el dispositivo, muchas funciones seguirán dependiendo de la nube o de un entorno híbrido; si su red es débil o su entorno de TI no está optimizado, el beneficio se diluye. El tercer reto es la gobernanza de datos y cumplimiento normativo: en Colombia la normativa de protección de datos, desistimiento comercial, Habeas Data y seguridad de la información debe considerarse; un equipo más potente también implica mayor riesgo si no se asegura. Una AI PC que procesa localmente datos sensibles sin políticas claras puede convertirse en vulnerabilidad. También el talento: los equipos requieren que los usuarios comprendan nuevas formas de trabajar, que los responsables de TI y Compliance actualicen sus competencias y que la organización acepte un nuevo paradigma de endpoint inteligente.
En el contexto de Latinoamérica además, la diversidad de entornos (zonas rurales, oficinas remotas, distintos proveedores de servicios) hace que la implementación no pueda ser “copia-pega” de un entorno europeo o norteamericano. Por ejemplo, el informe de CEPAL subraya que la región invierte solo 1,12 % del PIB en IA, frente a su peso digital estimado del 14 % del tráfico mundial de soluciones de IA. Esto significa que su empresa merece diseñar un camino adaptado a la realidad local: aprovechar incentivos, formar alianzas, optimizar procesos antes de gastar en hardware avanzado. Desde TODO EN UNO.NET propongo que se considere la adopción de AI PCs como parte de un programa más amplio de modernización digital que incluya automatización funcional, compliance normativo y cultura digital.
Una ventaja estratégica muy concreta que he constatado en empresas medianas en Colombia es que al cambiar a equipos IA-ready con soporte de software moderno, se logra un salto cual en productividad de analistas y equipos de ventas: por ejemplo, con modelado y análisis embebido en el dispositivo, los informes de ventas que antes tardaban horas se generan en minutos, los dashboards adaptativos se ejecutan localmente y el personal puede trabajar con menor latencia. Esto genera mejor respuesta al cliente, mayor motivación del equipo y una ventaja competitiva frente a empresas que siguen con hardware tradicional. Pero repito: el salto tangible se da cuando hay un “antes” definido, un “después” medido y un proceso soportado por capacitación y gestión del cambio. En un caso de otro cliente instalamos – como parte de un proyecto de automatización funcional – laptops con NPUs integradas + software de IA de productividad + política de datos corporativos revisada, y al cabo de seis meses se obtuvo una reducción del 22 % en tiempos de generación de reportes y una mejora del 18 % en satisfacción del equipo interno. Ese tipo de resultados se logra cuando la tecnología está al servicio de la funcionalidad.
Para que su empresa aproveche esta ola, le sugiero que considere estas preguntas estratégicas: ¿Cuáles son los procesos de su negocio que hoy podrían estar retardados por hardware o latencia ? ¿Su personal cuenta con equipos que apoyan directamente la productividad de inteligencia artificial (transcripción, modelado, sugerencias automáticas) ? ¿Ha considerado políticas de seguridad y de protección de datos ante la presencia de IA local ? ¿Su estrategia digital hacia 2026-2030 contempla un endpoint inteligente como parte del ecosistema, no solo el cloud o el servidor central ? Responder afirmativamente a estas preguntas es parte de alinear la tecnología con la funcionalidad, y así lo hemos hecho en TODO EN UNO.NET en múltiples industrias.
Recordemos también que adoptar AI PCs no significa renunciar al cloud ni al edge diferenciado: la clave está en diseñar una arquitectura híbrida inteligente. En muchos entornos latinoamericanos, combinar dispositivos IA-ready con un servidor o nube optimizada y políticas fuertes de gobernanza es más viable que intentar migrar todo a la nube de inmediato. También es importante considerar la obsolescencia: la generación de chips con NPUs está avanzando rápidamente, y según un artículo de Petri en octubre de 2025, el mercado global de PCs creció un 8 % en el tercer trimestre impulsado por PCs con IA. Esto indica que la ola ya viene, y mientras más rápido asuma el cambio, mejor será la posición de su empresa frente a competidores más reactivos.
Finalmente, desde la visión estratégica de TODO EN UNO.NET para el horizonte 2026-2030, visualizar su empresa con endpoints inteligentes, conectados, seguros, capaces de procesar localmente parte de su IA y alineados con la gobernanza de datos y la cultura digital es fundamental. No se trata solo de tener “computadores más rápidos”, sino de que esos dispositivos se conviertan en verdaderos aliados de transformación: que el director de finanzas pueda obtener insights en tiempo real, que el equipo de operaciones detecte fallas antes de paro, que el responsable de marketing interactúe con dashboards contextuales sin latencia, y que todo esto se haga sin perder el control de los datos, sin incrementar riesgos y sin disparar el coste operativo. En este sentido, su empresa puede marcar la diferencia.
Sé que quizá te sientas en un punto de reflexión: tienes inversiones recientes en infraestructura, quizás ya migraste parte de tus sistemas al cloud, y ahora tienes en frente la opción de cambiar los equipos — pero te preguntas si vale la pena ahora, con los desafíos de talento, datos e inversión que en Colombia pueden sentirse más severos que en otros mercados. Desde TODO EN UNO.NET, comprendo esa inquietud porque durante más de tres décadas he acompañado empresas que han vivido ese ciclo: primero la promesa, luego la adopción y finalmente la integración real. Hemos visto a directores de TI frustrados por no medir el impacto, y a líderes que lograron dar el salto porque definieron la funcionalidad antes del hardware. Por eso, te invito a que planteemos juntos una consultoría estratégica: empezamos con un diagnóstico profundo de tu entorno, definimos la hoja de ruta que involucra hardware IA-ready, procesos rediseñados, capacitación del equipo y el cumplimiento normativo que hoy es indispensable (desde Habeas Data hasta protección de endpoints). Luego implementamos de forma pragmática, orientada a resultados medibles y alineada con tu visión empresarial hacia 2030. Aumentamos la eficiencia de tu empresa con soluciones digitales y normativas. Y no termina ahí: con TODO EN UNO.NET te acompaño a consolidarte como referente dentro de tu sector, con seguimiento, actualización continua y crecimiento conjunto. ¿Listo para transformar tu empresa con tecnología funcional?